El proyecto que busca encontrar determinantes esenciales en la etapa de la pubertad que pueden desarrollar cáncer de mama en la adultez dirigido por Ana Pereira y el proyecto que busca recuperar las dietas tradicionales chilenas que sean saludables y sostenibles de Rebecca Kanter, ambas del INTA, ganaron fondo de desarrollo científico de iniciación.
El FONDECYT de iniciación, es un fondo que financia exclusivamente proyectos de investigación científica o tecnológica, que conduzcan a nuevos conocimientos y aplicaciones previstas a través de hipótesis explícitas en el trabajo. Todos los años se realiza un concurso que tiene como objetivo otorgar este financiamiento por 2 a 3 años de duración a jóvenes investigadores.
La Dra. Ana Pereira del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos presentó el proyecto “Estrogens exposure at the end of puberty influences female breast composition 4 years after menarche. Evidence from the growth and obesity chilean cohort study”, quetiene como objetivo general evaluar si los niveles de estrógenos endógenos (estradiol y estrona) y estrógenos dietarios durante la pubertad pueden determinar la densidad mamaria entre los 2 y 4 años post-menarquia, ya que esta última es una de los principales factores de riesgo de padecer cáncer de mama.
Se ha visto que la densidad mamaria es máxima al final de la pubertad y luego puede modificarse según otros factores, por ende el interés es estudiar por qué hay niñas que finalizan su pubertad con mayor densidad mamaria que otras, lo que podría implicar un mayor riesgo futuro, considerando que los estrógenos son necesarios para el desarrollo de la mama.
Por otra parte, la Phd Rebecca Kanter también del INTA, presentó el proyecto “Healthy and Sustainable Diets for Chileans: recovering traditional diets”, que tiene como objetivo general producir conocimientos sobre la sostenibilidad de las dietas chilenas tradicionales para identificar preparaciones culinarias que podrían promover las dietas saludables.
Su investigación tiene tres lineamentos de investigación, por una parte describir las dietas chilenas tradicionales por área geográfica Centro (Región Metropolitana), Sur (La Araucanía) y Norte (Arica Parinacota) y por características sociodemográficas. Por otro lado comprender la sostenibilidad de los preparativos culinarios tradicionales en el contexto local a nivel ambiental, cultural y nutricional y el acceso físico y económico. Y finalmente, desarrollar una intervención para promover dietas tradicionales sanas y sostenibles y caracterizar su aceptación en Chile.
Se espera que estos avances motiven más investigación con respecto a las opciones de alimentos saludables sostenibles y contribuyan de manera significativa a las recomendaciones de políticas públicas destinadas a ayudar a la población chilena a adoptar dietas saludables y sostenibles.
Los investigadores Gonzalo Jorquera y Pamela Urrutia publicaron un paper en la revista Aging and Disease sobre los efectos de la microbiota intestinal para evitar enfermedades asociadas al envejecimiento, a través de un modelo preclínico de trasplante de un donante joven a uno mayor. Su estudio comprobó que este procedimiento podría beneficiar la salud cognitiva en la vejez.
Con la entrega del documento a la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), la Universidad de Chile inicia una nueva etapa en su proceso de acreditación. Más de 200 personas participaron directamente en su elaboración y más de 15 mil miembros de la comunidad universitaria respondieron la encuesta de percepción. El texto reconoce los avances institucionales desde 2018, identifica desafíos prioritarios y orienta el compromiso con la mejora continua para alcanzar la excelencia en todos sus ámbitos.
Desde mayo de 2022, esta dirección liderada por Rodrigo Pulgar Tejo cuenta con oficina propia, equipo ampliado y procesos estandarizados para gestionar fondos y proyectos. Gracias a recursos internos, “matching funds” internacionales y aportes de PEEI, CINUT y Nestlé, enfrenta desafíos como atraer postdoctorados, elevar su productividad científica, modernizar laboratorios y lanzar la primera revista científica del instituto.
Los subproductos marinos, como cabezas y vísceras de pescado, podrían transformarse en una valiosa fuente de omega-3, impulsando una industria más sostenible y saludable. Investigaciones del Laboratorio de Lípidos del INTA de la Universidad de Chile revelan su alto contenido en EPA y DHA, nutrientes clave para la salud cardiovascular y cognitiva.