El documento, emanado desde el Proyecto de Innovación en Educación Superior en Género (InES Género) de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID) de la Universidad de Chile, propone una serie de recomendaciones para incorporar la perspectiva de género dentro de los procesos de postulación y adjudicación de fondos concursables internos del plantel. De esta forma, se busca contribuir a avanzar en una mayor igualdad de oportunidades en investigación, creación e innovación.
De acuerdo a la radiografía de género del Ministerio de Ciencias, Tecnología, Conocimiento e Innovación publicada en 2023, se observa una tendencia descendente de la participación femenina en la trayectoria formativa y académica. Además, solo el 35% de las publicaciones indexadas corresponde a mujeres. Por otra parte, en cuanto a la distribución de fondos otorgados por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), se evidencia una segregación disciplinar, donde solo el 28% de los proyectos en áreas de ingeniería y tecnología son adjudicados por mujeres.
El vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, Christian González-Billault, manifestó el interés de esta unidad por abordar estos desafíos. "Creemos firmemente en un desarrollo científico de vanguardia que incluya a todos y todas, sin excepción. En este sentido, estos criterios, además de ser de vanguardia, subrayan el compromiso de la VID y la Universidad con la reducción de las brechas de género presentes tanto en la sociedad como en la institución, especialmente en las etapas iniciales de las trayectorias académicas”, comentó.
La VID ha integrado una amplia gama de los criterios a sus convocatorias y proyecta su incorporación total. Además, el escrito fue enviado a las distintas unidades académicas de la Universidad para que pueda ser incorporado en los procesos internos. En esta línea, el vicerrector también puso énfasis en la importancia de promover iniciativas como esta para respaldar la equidad en la comunidad, invitando a "todas las unidades académicas del plantel a acoger las recomendaciones incorporadas en el documento, con miras a avanzar colectivamente para potenciar una generación de conocimiento con más oportunidades y equidad, desde la U. de Chile para Chile”.
Asimismo, la coordinadora del Proyecto InES Género, Patricia Retamal, se refirió al desafío que buscan enfrentar estas recomendaciones. “Es fundamental involucrar la perspectiva de género en los fondos concursables debido a que hemos observado una menor participación y éxito de las mujeres en los fondos internos. En conversaciones con académicas, nos indican que requieren de incentivos económicos para avanzar en sus investigaciones, por lo tanto, estas medidas buscan motivar a las mujeres a que postulen y, a su vez, nivelar los porcentajes de adjudicación para que formen parte del grupo de seleccionados”.
Por ello, indicó que este es un avance a nivel nacional, pues “organismos estatales como ANID y otras universidades públicas han implementado acciones similares, como adjudicación paritaria y extensión de plazos máximos por periodos de pre y post natal, por mencionar algunos. Esperamos que más universidades se unan a esta iniciativa”.
Desafíos y recomendaciones en la postulación a concursos
A nivel institucional, existen diversas iniciativas para impulsar y robustecer el quehacer del plantel. La VID, por ejemplo, convoca periódicamente a fondos concursables para incentivar el crecimiento investigativo y académico. 4 de las 6 convocatorias internas de esta unidad evidencian brechas de género en la adjudicación, de acuerdo al análisis que fundamenta los criterios impulsados por el Proyecto InES Género.
De acuerdo con la académica de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo e integrante de la coordinación de la Red de Académicas e Investigadoras, Rebeca Silva, las brechas presentes surgen a través de formas de segregación que experimentan las mujeres en espacios académicos, “generando barreras sumativas en su trayectoria y permanencia en la carrera académica. Es decir que esas inequidades no solo afectan la adjudicación de fondos, sino que tiene un impacto posterior en la propia capacidad de generar nuevo conocimiento”.
El documento con recomendaciones se direcciona a diversas áreas del proceso de postulación a concursos internos. En su primera sección, recomienda que los proyectos postulantes deban adjuntar una declaración jurada donde se acredite no estar vinculados a sanciones por acoso, violencia de género o intrafamiliar. Asimismo, que no se encuentren en el Registro Nacional de Deudores de Pensión de Alimentos y que cuenten con equipos paritarios.
En la fase de evaluación y adjudicación, los criterios sugieren la conformación de un comité evaluador equitativo en términos de género. También, se aconseja que solo el 40% de los proyectos seleccionados sean de hombres, punto que se aplicará en caso de presentarse un número suficiente de postulaciones admisibles presentadas por mujeres.
En cuanto al proceso de ejecución y seguimiento de los proyectos, el documento propugna la extensión de plazos máximos de entregas de resultados para quienes se encuentren en períodos de pre y post natal, fuero maternal y/o adopción paternal, así como también que cumplan labores de cuidado justificado. De igual manera, se busca resguardar la conciliación de la vida laboral, personal y familiar de quienes participan, por lo que se sugiere llevar a cabo actividades relacionadas con los proyectos en horarios laborales.
Finalmente, en los ítems de difusión y comunicación, se insta a que el contenido comunicacional relacionado represente a la diversidad de personas, identidades y expresiones de género, corporalidades, de roles, edades y de pertenencia indígena.
Finalmente, la profesora Silva señaló que el aporte principal de las recomendaciones “es garantizar el acceso de manera más equitativa, asegurando una mayor representación de las mujeres en los proyectos y disminuyendo la desigualdad en las trayectorias académicas. También es un avance en la transversalización del género porque da respuestas concretas a las políticas y sus objetivos estratégicos, a través de procedimientos internos e instrumentos que van transformando la estructura y cultura de nuestra institución”.