El reporte, la principal evaluación independiente sobre el estado de la nutrición global, cuenta con la académica e investigadora INTA, Camila Corvalán, entre su panel de expertos.
El Informe de Nutrición Mundial 2020, este año dedicado a la Equidad en Nutrición, fue lanzado este martes 12 resaltando que la pandemia de COVID-19 releva la importancia de que el bienestar nutricional alcance a todos.
“El Covid-19 no nos trata por igual. Las personas desnutridas tienen sistemas inmunes más débiles y pueden estar en mayor riesgo de enfermedad grave debido al virus. Al mismo tiempo, la mala salud metabólica, incluida la obesidad y la diabetes, está fuertemente relacionada con peores resultados de Covid-19, incluido el riesgo de hospitalización y muerte”, señala el Informe.
Camila Corvalán, académica INTA y directora del Centro de Investigación en Ambientes Alimentarios y Prevención de Enfermedades Crónicas Asociadas a la Nutrición (CIAPEC) de la Universidad de Chile, es miembro del panel integrado por 16 expertos internacionales de distintas disciplinas que participan en la elaboración del documento. Además, es la representante regional.
“En los últimos años, la región de Latinoamérica y el Caribe ha sido un ejemplo de iniciativas exitosas para reducir tanto el retraso del crecimiento como la obesidad. Sin embargo, la pandemia del COVID-19 ha expuesto la fragilidad de esos logros, en particular, para las poblaciones más vulnerables. Ahora más que nunca, los países de Latinoamérica y el Caribe deben mantener las medidas para garantizar una nutrición sana para todos. De lo contrario, habrá profundas repercusiones en el desarrollo regional”, expresó Corvalán.
Resultados
Si bien el Informe de Nutrición Mundial es una evaluación independiente, creada en 2014, surge apoyada por OMS, UNICEF, FAO y otros organismos internacionales, convirtiéndose en el principal instrumento de monitoreo de avances en el área de nutrición a nivel global.
“El informe tenía un foco original, antes de la pandemia del coronavirus, en términos de inequidad. El objetivo era mostrar que los avances observados en muchos indicadores nutricionales no le han llegado a todas las personas por igual, porque seguimos viendo diferencias importantes entre países e incluso en subgrupos dentro de un mismo país. El reporte hace un llamado a invertir en acciones que tienen mayor posibilidad de disminuir esa brecha. Es decir, a actuar a nivel del sistema alimentario y del sistema de salud, de modo de lograr mejorar la nutrición de toda la población”, explica.
La experta subraya la urgencia de reducir las brechas nutricionales porque: “la actual pandemia de COVID-19 ha mostrado que las personas con problemas nutricionales como la obesidad, enferman y se complican más; la pandemia además nos está mostrando que nuestros sistemas de atención de salud y nuestros sistemas alimentarios son muy frágiles. Ante cualquier tensión pueden desestructurarse y las personas dejan de recibir sus beneficios y se compromete su estado de salud y nutricional. Entonces ahora más que nunca tenemos que fortalecer los sistemas alimentarios para que sigan proveyendo alimentación saludable a toda la población, especialmente a los más vulnerables; como país, hoy no podemos darnos el lujo de retroceder en temas de nutrición”.